¿Qué significa establecer conexiones y cómo lo hacemos?
La mayoría de la gente cree que el amor, la intimidad y la conexión social son más importantes que cosas como la fama, la riqueza e incluso la salud física cuando se trata de su felicidad (Cacioppo & Patrick, 2008). Nuestra intuición es acertada porque la soledad representa una de las amenazas más importantes para nuestra salud física. La soledad puede afectar a nuestra salud tanto como la falta de ejercicio, la obesidad o el tabaquismo (Cacioppo & Patrick, 2008).
¿Qué significa exactamente estar "socialmente conectado"? ¿Es el número de personas que conoces? ¿Es la cercanía que percibes con otras personas de tu vida? ¿O es el número de relaciones de calidad que tienes? La respuesta podría sorprenderte... En realidad, es la combinación de todas estas cosas (Holt-Lunstad, Robles y Sbarra, 2017).
Por eso, cuando se trata de establecer contactos, nuestro objetivo no es simplemente conocer a más gente y aumentar el número de contactos que tenemos. Nuestro objetivo es encontrar a las personas que nos hacen sentir realmente bien con nosotros mismos, menos solos y bien apoyados. Después, debemos esforzarnos por sacar el máximo partido de estas relaciones para que se mantengan fuertes y sanas. Y por suerte, igual que podemos comer más sano y hacer ejercicio para mejorar nuestra salud, hay cosas que podemos hacer para combatir la soledad y sentirnos más conectados socialmente.
Cómo crear vínculos
Los amigos. Podríamos empezar por desarrollar y reforzar las conexiones personales que tenemos con amigos o colegas. Pregúntate: ¿hay algún amigo con el que te gustaría pasar más tiempo? ¿Hay algún compañero de trabajo que te parezca simpático y al que te gustaría conocer mejor? Establecer vínculos con personas que ya conoce personalmente puede ser una forma sencilla de empezar a sentirse más conectado socialmente.
La familia. Para quienes se sienten cerca de sus familias -o quieren sentirse más cerca- puede merecer la pena hacer un esfuerzo por hablar más a menudo. Aunque vivas lejos, puedes programar una charla telefónica o por vídeo con uno de tus padres o hermanos. También puedes planear unas vacaciones juntos para vivir juntos experiencias significativas de vez en cuando.
Extraños. Las investigaciones demuestran que incluso las pequeñas interacciones con extraños pueden ser buenas para nuestro bienestar (Sandstrom y Dunn, 2014). Así que no dudes en hablar con alguien en la cola del supermercado, charlar con el camarero de la cafetería o incluso preguntar por una dirección.
Grupos. Si nos identificamos con una religión, unirnos a un acto religioso puede ser útil. O podemos hacer un esfuerzo por conocer a nuestros vecinos, unirnos a un grupo de para dedicarnos a una afición que nos guste, acudir a eventos locales en un esfuerzo por conocer gente nueva o hacer voluntariado para conocer a personas con ideas afines.
Reforzar las conexiones
Además de crear un mayor número de conexiones, es importante que nos sintamos realmente conectados con las personas con las que pasamos tiempo. Y la forma en que interactuamos con las personas tiene un efecto directo en lo conectados que nos sentimos con ellas. Por eso puede ser muy importante una comunicación interpersonal eficaz. He aquí algunas estrategias.
1. Escuchar activamente. La escucha activa consiste en estar realmente presente cuando otra persona está hablando. Asentir con la cabeza, reforzar lo que dicen y centrarse en ellos son acciones clave. Asegúrate también de no dejar que tu mente divague hacia otras cosas o hacia lo que vas a decir a continuación.
2. Cultivar la empatía. La empatía implica mental y emocionalmente intentar ponerse en el lugar de la otra persona. Intenta comprender cómo sería su situación desde su punto de vista.
3. Sea sincero. Las relaciones cálidas y de confianza se basan en la honestidad. Así que asegúrate de decir la verdad y compartir tu verdadero yo con aquellos con los que quieres establecer vínculos.
4. Utiliza la regulación de las emociones. Gestionar las emociones es fundamental para poder superar las dificultades con las personas que te importan.
5. Presta atención a las señales no verbales. La gente dice mucho con su lenguaje
corporal. Intenta prestar atención a lo que te dicen los demás con sus señales no verbales. Por ejemplo, si alguien mira mucho a su alrededor o se aleja de ti, puede que esté dispuesto a abandonar la conversación.
6. Comparte tus historias. Revelar información personal (poco a poco) puede ayudar a los demás a sentirse más cerca de nosotros. Así que puede ser útil utilizar la auto divulgación para mejorar tus conexiones.
7. Prueba la meditación de bondad amorosa. Es un tipo de meditación en la que imaginamos que enviamos amor a los demás. Puede ayudar a fortalecer nuestras habilidades de compasión, bondad y amor.
8. Diario de gratitud. Escribir un diario o una lista de agradecimientos puede ayudarnos a apreciar las conexiones que tenemos y, como resultado, a aportar lo mejor de nosotros mismos a nuestras interacciones sociales.
Crear vínculos sociales fuertes puede ser una de las mejores cosas que podemos hacer para mejorar nuestra salud y bienestar. Aunque hay muchas maneras de hacerlo, no siempre resulta fácil en nuestro mundo de "isla en sí mismo". Así que dar un paso cada vez puede ser una buena forma de sentirnos más conectados, sin prisa, pero sin pausa.
Referencias
● Cacioppo, J. T., y Patrick, W. (2008). La soledad: La naturaleza humana y la necesidad de conexión social. WW Norton & Company.
● Holt-Lunstad, J., Robles, T. F., & Sbarra, D. A. (2017). Avanzando en la conexión social como una prioridad de salud pública en los Estados Unidos. American Psychologist, 72(6), 517.
● Sandstrom, G. M., y Dunn, E. W. (2014). ¿Está sobrevalorada la eficacia? Las interacciones sociales mínimas conducen a la pertenencia y al afecto positivo. Social Psychological and Personality Science, 5(4), 437-442.
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